Descubra cómo los compuestos de Echinacea purpurea tienen actividad inmunomoduladora, antiinflamatoria, antibacteriana y antiviral. Le invitamos a conocer más sobre esta planta que ha ganado popularidad en la búsqueda de opciones naturales para potenciar el sistema inmunitario.
Echinacea purpurea es una planta reconocida por sus efectos aplicables a la salud humana. Los fitoquímicos presentes en ella han sido estudiados por sus posibles beneficios, en especial, en relación con el sistema inmunitario.
Algunas de las propiedades reconocidas son las siguientes:
- Modulación de la inmunidad: es decir, que ayuda a regular la actividad inmunitaria, ya sea estimulándola o suprimiéndola.
- Antiinflamatoria: pudiendo bloquear algunos mediadores de la inflamación.
- Antibacteriana: exhibe actividad contra ciertas bacterias.
- Antiviral: también exhibe actividad frente a ciertos virus.
Echinacea purpurea contiene una variedad de compuestos bioactivos, incluyendo alquilamidas, polisacáridos, flavonoides y ácidos fenólicos, que se cree que trabajan en sinergia para ejercer sus efectos beneficiosos en el sistema inmunitario.
Estimulación y modulación de la inmunidad
Uno de los principales efectos de Echinacea purpurea es su capacidad para estimular el sistema inmunitario. Se ha observado que los componentes de la planta aumentan la actividad y la producción de células de defensa, como los macrófagos y las natural killer (NK). Estas células son fundamentales para la detección y eliminación de patógenos.
Los polisacáridos, los eicosanoides, el ácido cicórico, el ácido cafeico y las alquilamidas de la planta incrementan la producción de interleucinas 1 y 6, así como la de interleucina 10. Estos tres mediadores provocan una mayor actividad de los neutrófilos y, por ende, mayor velocidad y precisión para la identificación y destrucción de microorganismos patógenos.
Además, ha sido asociada con la activación del factor de necrosis tumoral alfa (TNF-α), que junto a las ya mencionadas interleucinas 1 y 6 (IL-1β e IL-6), desempeña un papel crucial en la regulación de la respuesta inmunitaria. Gracias al TNF-α se reclutan neutrófilos y monocitos que son activados para erradicar microorganismos.
Efecto antiviral
Echinacea purpurea posee actividad contra varios tipos de virus, incluidos los del resfriado común y la gripe. Se cree que la planta inhibe la replicación y reduce la carga viral al interferir en la entrada y la liberación de las partículas virales en las células huésped.
El mecanismo antiviral de Echinacea purpurea parece involucrar a las alquilamidas, que actúan mediante la estimulación de la producción de interferón tipo I (IFN-I). Los interferones son proteínas que desempeñan un rol concreto en la respuesta inmune, al activar diversas vías antivirales y promover la muerte celular programada de las células infectadas.
Propiedades antiinflamatorias
Los compuestos de la planta también han sido estudiados por sus propiedades antiinflamatorias. Se ha observado que equinácea disminuye la liberación de ciertas citocinas proinflamatorias, lo que puede contribuir a reducir la inflamación asociada con infecciones respiratorias y otras enfermedades.
Las principales responsables serían las alquilamidas. Estas sustancias inhiben ciclooxigenasas y lipoxigenasa-5, lo que redundará en un menor efecto inflamatorio.
Activación de receptores de patrones moleculares
Otro mecanismo por el cual Echinacea purpurea fortalece el sistema inmunitario es a través de la activación de los receptores de patrones moleculares (PRRs). Estos receptores reconocen estructuras características de los patógenos y desencadenan respuestas específicas de defensa.
Echinacea ha sido asociada con la activación de PRRs como el receptor de ácido lipopolisacárido (LPS) y el receptor toll-like 4 (TLR4). De este modo, provoca una up regulation de la transcripción de genes que derivan en mayor producción de interferones y mayor quimiotaxis de neutrófilos y monocitos. Por lo tanto, habrá mayor presentación de antígenos a las células de defensa, lo que mejorará la capacidad del sistema inmunitario para combatir las infecciones.
Este mecanismo se potencia con la hipermetilación de ADN que también se atribuye a Echinacea purpurea. Así, se mejora la inmunidad de memoria. La hipermetilación es un paso necesario para que las células de defensa puedan dirigir la respuesta inicial a los antígenos que ya conocen.
Inhibición de enzimas proteolíticas
También es posible que ejerza un efecto inhibidor sobre ciertas enzimas proteolíticas, como la hialuronidasa. Esta enzima es secretada por algunas bacterias y contribuye a la diseminación de la infección, al romper el tejido conectivo del huésped. La inhibición de la hialuronidasa podría limitar la propagación.
Todos estos efectos son sinérgicos entre sí. Además, se postula que los compuestos activos de la planta tienen también efectos sinérgicos con algunos antibióticos, como eritromicina, ciprofloxacina y ampicilina. Todas estas características remarcan el potencial de Echinacea purpurea para la prevención y el tratamiento de las infecciones respiratorias.
Referencias:
- Declerck, K., Novo, C. P., Grielens, L., Van Camp, G., Suter, A., & Vanden Berghe, W. (2021). Echinacea purpurea (L.) Moench treatment of monocytes promotes tonic interferon signaling, increased innate immunity gene expression and DNA repeat hypermethylated silencing of endogenous retroviral sequences. BMC Complementary Medicine and Therapies, 21(1), 141.
- López M. (2005). Equinácea: su acción contra los síntomas del resfriado. Ámbito Farmacéutico-fitoterapia, 24(1), 68-74.